Por Rosario Ruiz
Cuando entras al bar “La Sanmiguelada”, lo primero que notas es un hermoso mural que cubre las cuatro paredes de la habitación. Mientras más lo observas más detalles encuentras, y si conoces la historia de San Miguel podrás identificar el significado de cada elemento que se representa.
Entre colores suaves y cálidos danzan los personajes de Los Locos con sus máscaras de diablo, Ignacio Allende posa en su caballo, Josefa e Hidalgo se miran frente a frente como enamorados, San Miguel Arcángel custodia la entrada, los mariachis tocan alegremente y se observan los cuetes de la Alborada, todos representados con humor y picardía.
José Luis Arias es el artista visual detrás de esta magnífica obra. Desde la primera vez que visitó San Miguel, en el 98, se enamoró completamente de la atmósfera, calidez y magia de la ciudad. Le pareció maravilloso el compromiso de la gente por conservar y mostrar con orgullo sus tradiciones, y se sintió atraído por la comunidad artística y extranjera que combina tan bien con los sanmiguelenses y su cosmovisión.
En palabras del artista, este mural es un homenaje a la historia de San Miguel y de México, pero sobre todo a su gente. Es una resignificación de la cultura popular para darle la importancia y el valor que se merece. En él vemos plasmadas las fiestas más famosas de la ciudad —la fiesta de San Antonio de Padua, las emblemáticas bodas, la Independencia de México, la fiesta de San Miguel Arcángel, Día de Muertos— y a los personajes más característicos de México, como Diego Rivera, Frida Kahlo o el Pípila.
La cultura mexicana está llena de leyendas y el mexicano siempre busca el lado cómico de su vida, incluso de su propia muerte. Por ello muchos de los personajes están representados como catrinas, haciendo alusión también al artista José Guadalupe Posada.
El mural utiliza varios estilos, entre los que destacan el puntillismo, cubismo y el abstracto. Arias homenajea también a Siqueiros, Orozco, Diego Rivera y a Jorge González Camarena, todos ellos grandes representantes del muralismo en México.
La paleta de colores elegida es desaturada y fue pensada para relajar al espectador, para introducirlo a un ambiente de paz, por ello predominan los tonos cafés y amarillos. Como se encuentra dentro de un bar, el artista quiso que los sabores y las bebidas fueran los protagonistas, mientras que el mural solo es un complemento agradable y divertido para el visitante.
Para el artista, lo más importante es que su obra sea capaz de contar una historia y transmitir emociones, que el espectador se sienta atraído por lo que está representado, que se haga preguntas, que mientras disfruta pueda aprender. Este es un mural didáctico que enseña al visitante la esencia de lo que es y representa San Miguel de Allende para México y el mundo.
Te invito a que te des una vuelta por el bar “La Sanmiguelada”, ubicado dentro del hotel Hacienda El Santuario, en la calle Aldama 41, para que admires con tus propios ojos la magia de este mural mientras disfrutas una copa.
Para conocer más sobre la obra del artista, puedes visitarlo en su estudio en la calle de Recreo 10, o contactarlo vía correo electrónico a info@joseluisarias.mx. También puedes buscarlo en sus redes sociales: Instagram @joseluisarias.mx y Facebook /joseluisarias.mx
