La importancia de la mastografía 

Por Rodrigo Díaz

De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social, el cáncer de mama ocupa el lugar cinco entre las principales causas de muertes en mujeres, en todo el mundo. En México,  fue la enfermedad más frecuente durante el 2020 (15.3%), y la primera causa de muerte en mujeres, con un estimado de 29 mil 929 nuevos casos, y siete mil 931 muertes —con una tasa de incidencia de 40.5 y mortalidad de 10.6 por 100 mil—. 

Por ello, recientemente platicamos con el Técnico Radiólogo Jorge Trejo para hablar sobre la mastografía, uno de los servicios que brinda el Centro Especializado en Imagenología Integral (CEII) dentro de las instalaciones del Hospital Joya San Miguel. La mastografía, nos comenta, es uno de los métodos más efectivos para la detección oportuna y prevención de cáncer de mama. 

Alrededor de esta práctica médica, hay muchos mitos derivados de la falta de información, de los cuales los más comunes, según lo expresan los pacientes, son la creencia de que la mastografía provoca cáncer de tiroides. Incluso hay quienes piden que se les coloque un collarín para disminuir el riesgo de contraerlo; lo que es totalmente innecesario, ya que no existe ningún riesgo de que este método favorezca al cáncer. Otra creencia es la de sufrir una lesión en el seno por la presión que se requiere. Esto es únicamente viable con un manejo inadecuado en el equipo, nos platica el técnico. 

De acuerdo con el Instituto Nacional de Cancerología, se recomienda que todas las mujeres a partir de los 40 años se hagan una mastografía de detección al año, y deben continuar haciéndose este examen mientras estén en buen estado de salud. El cáncer detectado tempranamente tiene grandes posibilidades de éxito en el tratamiento y en la curación. El estudio suele complementarse con un ultrasonido mamario, siendo recomendado en mujeres menores de 40 años, aunque, si su médico requiere una mastografía, también se lleva a cabo el estudio con los cuidados necesarios. 

En CEII se cuenta con equipo digital de alta gama, lo que significa que se expone a menos radiación en menor tiempo, logrando imágenes de alta calidad para la identificación de lesiones mínimas. Además, se cuenta con personal altamente calificado, logrando así que los estudios sean de lo más eficaces.  

Afortunadamente en San Miguel contamos con clínicas, hospitales y centros de imagenología donde se pueden llevar a cabo estudios como la mastografía y el ultrasonido mamario. Sólo queda poner de nuestra parte como ciudadanos, desmitificar a través de la información y hacer lo propio en pos de nuestra salud y, con el ejemplo, de la comunidad.