¿Un chocolatito?

Por Fernanda Noriega 

El sabor, el aroma, la decoración y el ambiente acogedor de la tienda chocolatera convierte JOHFREJ C&V en una experiencia inigualable para todo aquel que se considere amante del chocolate.

Ramón Patiño, encargado de la tienda, describe la esencia del lugar como una fusión de culturas: al entrar, lo primero que atrapará tu vista es Ek – Chuah, el dios maya del cacao representado en una escultura junto a un auténtico metate, que era lo que se utilizaba antiguamente para procesarlo, así como en las paredes se aprecian cintillos de grecas mayas; sin embargo, las vitrinas en donde reposan los chocolates tienen un toque refinado, con acabado de estilo europeo. “Desde mucho tiempo antes de la conquista, los mayas ya utilizaban el cacao como moneda o bien en ceremonias, pero los españoles exploraron formas de combinarlo con azúcar, leche, licores u otras cosas. De ahí surge el chocolate como lo comemos hoy”, menciona Patiño, quien se dedica al chocolate artesanal desde hace varias décadas y desea que los clientes conozcan la historia que guarda el protagonista del negocio.

JOHFREJ C&V debe su excepcionalidad a la producción artesanal. Los hermanos Jorge, Oscar, Hugo, Felipe, Ramón, Eduardo, Javier, Claudia y Verónica, que son las iniciales del nombre, consideran que la industrialización cambiaría por completo el sabor y por ello, conservan la “hechura” del chocolate en talleres caseros, explorando nuevas combinaciones y formas de potencializar su producto “estrella” y, ¿Por qué no? Acompañarlo con un helado o un café, producidos artesanalmente también por los chocolateros.

Cualquier día de la semana, de las 10:00 am hasta las 7:00 pm podrás disfrutar de chocolates amargos, semi amargos, dulces, con nueces o rellenos varios, todos producidos con cacao criollo de Tabasco, “el mejor grano que hay en México”, comparte Ramón, orgulloso.

San Miguel, desde hace más de 22 años alberga la sucursal ubicada actualmente en la calle 2da de Jesús, zona centro, pero si después de irte del pueblo quieres volver a probar un delicioso JOHFREJ, puedes encontrar tres tiendas más en Texcoco y Querétaro.

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