Por María Ruiz
Quizá muchos de nosotros tengamos la idea de que México es solo desierto y que para disfrutar de hermosos bosques tenemos que viajar a otros países. Pero no. En México contamos con una gran variedad de vegetación, que incluye bosques de coníferas, latifoliadas y mesófilo de montaña. Basta con irnos a la sierra de Guanajuato o de Querétaro para encontrar un poco de esta vegetación.
Pero ahora quiero contarte sobre un hermoso municipio en el estado de Hidalgo: Mineral del Chico, un pueblo minero entre montañas. Desde San Miguel son unos 300 km, unas cuatro horas de camino. Para llegar allí hay que tomar la carretera a Querétaro, incorporarse a las ruta 57D, pasar la caseta de Palmillas, entrar al Arco Norte, llegar a Pachuca y después seguir por 33 km hasta llegar a “El Chico”. En esta última parte disfrutarás de increíbles y hermosos paisajes, así que será mejor que saques tu cámara y tomes algunas fotos.
Este es un destino ideal para hacer ecoturismo gracias a la diversidad de actividades que puedes realizar:
- Visita el Parque Nacional El Chico, recorre a pie o con una bici de montaña 2,739 hectáreas de bosque.
- Dentro del Parque Nacional El Chico, encontrarás el mirador Peña del Cuervo, un magnífico lugar para admirar las bellezas naturales de la zona.
- Si te gusta el rappel, hacer senderismo o quieres hacer pesca deportiva, el Parque Recreativo El Cedral es el lugar perfecto.
- También podrás encontrar actividades para hacer tirolesa y escalar montañas.
- No pierdas la oportunidad de visitar la Mina de San Antonio, una de las más antiguas de la región y donde se extraía plata.
- En cambio, si quieres un paseo más tranquilo, puedes recorrer las bellas calles del pueblecito, comprar artesanía de la región y dejarte conquistar por una deliciosa taza de café en la plaza.
Para dormir, hay varias opciones: puedes elegir una preciosa cabaña en los alrededores u hospedarte en algún hotel. Para comer, la barbacoa y los pastes son la estrella del lugar. Si vas en temporada de lluvias o en otoño-invierno, ¡no olvides abrigarte bien!
Estoy segura de que, si eres amante de los bosques como yo, te encantará este precioso lugar.