Tijuana, una ciudad de reputación vibrante y emocionante.

Por Josemaría Moreno  

Recientemente visité Tijuana y aunque esperaba encontrarme con una ciudad dinámica y multifacética, la realidad fue incluso más sorprendente. La ciudad es vibrante, su propuesta culinaria –una mezcla obvia entre México y EE.UU. – es novedosa y su gente extremadamente amable. Aquí les dejó unos cuantos consejos para el que se quiera aventurar al viaje. 

Lo primero es el transporte. Actualmente los vuelos económicos abundan, especialmente con Viva Aerobus y Volaris. Yo viajé con esta última por 1,700 pesos en viaje redondo y salí del aeropuerto de León a las 9 de la mañana. Ciertamente es difícil llegar de San Miguel de Allende al aeropuerto a esas horas ya que, si quisieras llegar en autobús, primero tendrías que llegar a Guanajuato o León, pero no hay conexiones a esas horas, por lo que yo tomé el shuttle de Bajío Go por 500 pesos: te recogen en tu casa y te dejan a la hora deseada en el aeropuerto. De regreso volé a la misma hora y por facilidad volví a utilizar los servicios del shuttle; no es económico, evidentemente, pero es práctico. 

En cuestiones de hospedaje en Tijuana, no tendrás problemas en encontrar un hotel o un airbnb que se adapte a tu presupuesto y necesidades. Yo tuve la fortuna de poder quedarme en casa de amigos, lo que hizo la experiencia mucho más sencilla y atractiva. 

Ya en Tijuana, el itinerario es versátil según lo que estés buscando. En particular me gustaría recomendar tres lugares que te abrirán el panorama y serán como puntos de partida para que puedas escoger tu propia aventura. El primer lugar es un punto de referencia muy reconocido: CECUT (Centro Cultural Tijuana). El recinto es icónico –una gran esfera de color tierra que alberga un cine IMAX– que además cuenta con un museo de la historia regional. El paseo por el museo es interesante y contiene información bien fundamentada de la peculiar historia de Tijuana y sus alrededores, desde sus primeros pobladores a la actualidad –hay que recordar que Tijuana es actualmente la segunda ciudad más grande del país. 

Después, al atardecer, puedes visitar una cervecería con un concepto diferente: Cerveza Frontera, ubicada en Cam. Vecinal 1125, Los Pirules. Curiosamente, esta cervecería se encuentra en un local que es parte de una especie de central camionera o de abarrotes, llegar hasta su estacionamiento puede causar algo de confusión, pero si sigues las indicaciones en tu buscador en línea no tendrás mayor problema. El lugar es un tap room de estilo industrial, limpio y abierto. En la barra puedes probar todos los estilos que tienen en existencia y en la planta baja puedes observar la fábrica donde producen sus cervezas. Todos sus estilos de cerveza son de altísima calidad.

Por último, una recomendación amplia: no dejen de pasar por la Avenida Revolución, la famosísima calle que inicia en el puente fronterizo entre Tijuana y San Diego. Aquí encontrarán un popurrí de comercios, restaurantes (como el Restaurante Caesar´s, donde nació la ensalada César), cervecerías y bares, conciertos de todo tipo (Nirvana, por ejemplo, tocó aquí en los 90s y fue el único lugar en el que se presentaron en México), y en general un ambiente festivo, acelerado, colorido y ecléctico.