19 de agosto Día Mundial de la Asistencia Humanitaria

El valor de la ayuda en tiempos de crisis

Por Paola Velasco 

En diciembre de 2008, la Asamblea General de la ONU declaró el 19 de agosto como el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, en memoria del brutal atentado terrorista del 19 de agosto de 2003 contra la sede de las Naciones Unidas en Bagdad (Iraq), que cobró la vida de 22 personas, entre ellas del enviado de la ONU, Sergio Vieira de Mello.

Las crisis humanitarias son fruto de catástrofes naturales, pero también pueden estar causadas por la labor del hombre (conflictos armados). Dan lugar a situaciones de pobreza extrema, así como a violaciones de derechos humanos. Ante una crisis humanitaria, en muchas ocasiones se hacen necesarios los desplazamientos masivos de personas para poder sobrevivir, bien sean refugiados en países extranjeros, o bien como personas desplazadas dentro de sus propios países.

Los Días Internacionales dan la oportunidad de sensibilizar a la sociedad sobre temas de gran interés, tales como los derechos humanos, el desarrollo sostenible o la salud. Al mismo tiempo, pretenden llamar la atención de los medios de comunicación y los Gobiernos para dar a conocer problemas sin resolver que precisan la puesta en marcha de medidas políticas concretas.

En el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria, el mundo rinde tributo a los trabajadores humanitarios que han sido asesinados o resultaron heridos en desempeño de su labor, y honramos a todos los trabajadores humanitarios y los profesionales de la salud que continúan, a pesar de las dificultades, prestando asistencia y protección a millones de personas.

La acción humanitaria es imprescindible, dado que tiene como objetivo proteger y salvar vidas, velar por los derechos humanos, así como aliviar el sufrimiento de las poblaciones ante las situaciones límite y de emergencia, mediante la atención de sus necesidades básicas.

Principios humanitarios:

  • Humanidad: el sufrimiento humano debe ser atendido donde quiera que se encuentre. El objetivo de la acción humanitaria es proteger la vida y la salud, y garantizar el respeto de los seres humanos.
  • Neutralidad: los actores humanitarios no deben tomar partido en las hostilidades y en las controversias de orden político, racial, religioso o ideológico.
  • Imparcialidad: la acción humanitaria debe llevarse a cabo en función de la necesidad, dando prioridad a los casos más urgentes y sin hacer distinciones sobre la base de la nacionalidad, raza, sexo, creencias religiosas, clase u opinión política.
  • Independencia operativa: la acción humanitaria debe ser autónoma de los objetivos políticos, económicos, militares o de otro tipo que cualquier agente humanitario pueda tener respecto a las zonas donde se estén ejecutando medidas humanitarias.

Referencias: https://www.un.org