Por Jesús Aguado
Un Centro Histórico vivo, aquél en el que pueden subsistir negocios y habitantes, es el que han buscado algunas administraciones. Hoy, aunque no hay un censo que nos diga cuántos habitantes hay en la zona, las tradiciones decembrinas son enviadas del Jardín Principal hacia otras plazas públicas, o incluso colonias.
Y partiendo justo de esa idea, en que ya es poca la población que vive en el Centro, es que las tradicionales posadas se llevarán a diversas colonias. Los locales que abrían sus balcones y lanzaban dulces a los peregrinos; abrían sus puertas y repartían ponche; colgaban una piñata en la calle para diversión de quienes acompañaban el misterio; o daban regalos a la virgen María, San José, y al Ángel, cada vez fueron siendo menos. La razón es simple, los locales vendieron sus casas, y se fueron a las orillas; o quienes aún las conservan las rentaron a terceros, y es en más de ellas donde se alzan los bares, restaurantes, tiendas.
Los que recuerdan el origen
Las misas de aguinaldo—aquellas en que se daban dulces y galletas, de ahí el título—fueron aquellas que iniciaron en 1737 en el Oratorio. Y es ahí donde todavía las más tradicionales ocurren. Hay una misa a las 6pm. Luego un acólito tira de una carreta en que van esculturas de los Santos Peregrinos—La Virgen María sobre un burrillo, San José, y el ángel). Detrás van los niños que van a misa, vestidos de pastores. Luego los adultos cantan la letanía. Son tres vueltas las que se dan dentro del templo. La Tuna Oratoriana pide la posada—entonando el tradicional ‘os pido posada’—del templo del Oratorio hacia la Santa Casa de Loreto.
“Avecillas tristes que cantáis al alba, para acompañarnos en esta posada” es un canto recurrente en las posadas de San Miguel. “Llegó el tiempo” es otro. Estos cantos, acorde a la tradicionalista Gloria Rodríguez Navarrete, fueron compuestos por los sanmiguelenses José María Correa y Genaro Sandí. Y ahí, en el Oratorio se conservan, y cantan cada año.
¿Qué es eso de las posadas públicas?
Las posadas públicas, consisten en un misterio viviente que recorre (sobre un carro) las calles de la ciudad—como ya comentamos, ahora será solo en colonias. Éstas incluyen música tradicional con violín, trompeta, y guitarra en vivo, y los tradicionales villancicos que cantan los peregrinos, entre éstos van: “Camina Gilita, que vendrás cansada; por aquellos montes haremos posada”, “Ándale Batito chíflale al ganado; vamos a dar agua al río colorado”, entre otras decenas de cantos.
Una viñeta publicada por el entonces cronista de la ciudad, José Cornelio López, en 1995 indica que las posadas públicas ya se realizaban en 1913 en San Miguel, sin embargo, fueron suspendidas debido a la guerra revolucionaria. En esa época el carro con los peregrinos era tirado por mulas. En 1939, el presidente municipal Eulalio Nava (información que confirma Gloria Rodríguez Navarrete), retomó la tradición perdida.
La maestra Navarrete, quien incluso fue invitada a participar como virgen en 1956, recuerda que el carro utilizado era “el carretón de la basura”. Comentó que la posada la encabezaban los pastores, acompañados de música de guitarra, trompeta y saxofón y posteriormente el carro con el misterio. “Había un señor que se llamaba Antonio Correa, él tenía un carro muy destartalado donde subía un piano junto con un coro. Cada que la posada hacía una parada, ellos cantaban los villancicos clásicos de la ciudad”.
Otro tradicionalista, Gustavo Vidargas, recordó que en el pasado (aunque la fecha es incierta) la única posada que se realizaba en las calles (ahora se realizan en cada colonia) era la del centro de la ciudad y comentó que era una posada que la gente hacía suya, pues cuando pasaban el misterio, desde los balcones las familias lanzaban dulces y fruta para la gente que iba siguiendo el misterio. Otras colgaban piñatas a la mitad de la calle para que fueran quebradas por los acompañantes de los peregrinos.
Vidargas recordó que había un señor llamado Rodolfo Pérez. Él tenía la concesión de la cervecera Corona en San Miguel, y cuando los peregrinos pasaban por la calle de Relox, el señor lanzaba charolas de la cervecera. En la calle de San Francisco, recuerda que la familia Alcalá aventaba sobreros, además de la fruta. También remembró cómo en la plaza Principal el señor Manuel Zavala dejaba caer desde la Posada San Francisco, paracaídas que venían acompañados de billetes.
Nuevo programa
Acacio Martínez, el director de Cultura y Tradiciones de la administración municipal, dijo para Atención que este año habrá varios conciertos navideños en el teatro Ángela Peralta, y todos son sin costo. Éstos iniciaron el martes 14 de diciembre con el coro de la Universidad de Guanajuato, y el 15 con la Sinfónica Infantil de San Miguel.
El programa decembrino en el Peralta continuará el 16 de diciembre con el Ensamble de Maestros de la Orquesta Sinfónica de San Miguel a las 7pm. Para el sábado 18, únicamente hay 50 lugares disponibles para asistir a las 12 del día a un concierto con el coro Promúsica de México, éste se presentó el día anterior en Casa Europa, y luego se presentará en el Peralta. El domingo 19, el escenario será tomado por el Coro de la Biblioteca Pública de San Miguel de Allende, AC. Todos los conciertos son gratuitos. Basta con llegar al teatro el día del evento, y solicitar un espacio.
Sobre las posadas públicas, dijo el director que serán llevadas a las colonias. Éstas saldrán de la iglesia o centro religioso del barrio, recorrerán las calles principales, con el misterio, la música en vivo, cantos tradicionales, y dulces para los que asistan. Solo la última el 24 de diciembre, tomará lugar en el Centro. El misterio dará una vuelta al Jardín Principal, y luego con el padre Briones de la parroquia, se arrullará al Niño Dios, que se dejará en el nacimiento colocado desde el 18 de diciembre, hasta el 6 de enero.
Las colonias que visitará Cultura y Tradiciones con el carro de las posadas son: en orden a partir del 16 de diciembre (una cada día) el Valle del Maíz, Infonavit Allende, San Rafael, San Felipe Neri, Guadalupe, San Luis Rey, Malanquín, colonia Allende, para finalizar el 24 en el Jardín Principal.
