Por Luis Felipe Rodríguez
El 15 de diciembre de 1555 el virrey Velasco ordenó la creación de una Villa de españoles en San Miguel, con un propósito básicamente militar. Él iba a supervisar el proyecto personalmente, pero una enfermedad lo inmovilizó en Apaseo. Comisionó al Capitán Ángel de Villafañe para fundar el pueblo defensivo, asignando los solares para casas, tierras para cultivos y huertos a 50 colonos españoles. Las tierras de los españoles estaban aparte de las tierras que ocupaban ya los indígenas.
Tres días después estando en Querétaro, el virrey mandó que las autoridades de Guango, Cuitzeo, Acámbaro y Querétaro enviasen un total de 50 indígenas para trabajar en la construcción del pueblo. También comisionó a Villafañe para que anulara todas las estancias que estaban en un radio de tres leguas alrededor del pueblo. El mismo día se nombraron los gobernadores indígenas, uno para los otomíes, don Juan de San Miguel; y otro para los chichimecas y tarascos, don Domingo.
El 17 de diciembre de 1559, Velasco otorgó el título de Villa a San Miguel, con órdenes a los colonos españoles de que debían organizar un Cabildo el día 1 de enero de 1560. De esta manera, el asentamiento fronterizo fue integrado al sistema político virreinal.
En julio de 1561 el virrey Velasco mandó instrucciones al alcalde mayor de la provincia de Jilotepec (la cual incluye a los pueblos del camino a Zacatecas desde Jilotepec hasta San Miguel) dar a los vecinos de San Miguel dos caballerías de tierra en la demarcación de los indios, así como un solar para la venta a la orilla de la villa y cuatro solares para hacer casas.
Según Gerhart, Ángel de Villafañe desempeñó el cargo de alcalde mayor de San Miguel en 1555 pero no duró mucho tiempo. En 1559, cuando el virrey Velasco expidió el título de Villa a San Miguel El Grande este asentamiento todavía pertenecía a la alcaldía mayor de la provincia de Jilotepec y Chichimecas.
En 1561 dependía de la alcaldía mayor de Jilotepec. Un poco después de la fundación de la Villa de San Felipe, en 1562 se eligió otra vez una alcaldía mayor para esta región específica abarcaba las nuevas Villas de San Miguel El Grande y San Felipe.
Tomado de: “La conquista del Bajío y los orígenes de San Miguel de Allende” de David Charles Wright Carr.