Por Carolina de la Cajiga
«Mi madre era trabajadora social y me enseñó a interesarme por los demás. Aunque me gradué del Tecnológico de Monterrey con un título en diseño industrial, cuando me mudé a San Miguel, mis planes cambiaron. Me sorprendió el gran número de personas mayores que vivían aquí. Descubrí que tenía una afinidad natural para entender sus necesidades. Instintivamente, me di cuenta de los problemas a los que se enfrentan, sobre todo los que viven solos y carecen de conocimientos suficientes para encontrar la atención que necesitan. Mi corazón se magulló al ver este sufrimiento. Mi cerebro se puso en marcha buscando soluciones para ayudarles», explica Diana.
«Empecé a investigar cómo funciona el cuidado de salud de las personas mayores. Cuando los escultores observan un bloque de mármol, visualizan intelectualmente lo que esconde la piedra. Siguiendo las vetas como guías, saben dónde y cómo cortar para crear lo que su mente ve. Así empecé a tallar y pulir mis ideas hasta que surgió un plan completo. No inventé nada. La asistencia sanitaria a las personas mayores existe. Sólo la he ido actualizando y transformando para adaptarla a lo que se necesita aquí en San Miguel», expresa Diana con confianza.
«Estoy orgullosa de haber creado Home Life Care, una organización que orienta y conecta al adulto mayor o a cualquier persona que lo necesita con el proveedor adecuado. No tener experiencia en servicios médicos me dio la libertad de combinar diferentes especialidades y cumplir con mis compromisos morales y sociales.»
Home Life Care (HLC) ofrece compañía, cuidados, enfermería, primeros auxilios y asistencia geriátrica a ancianos o personas que se recuperan de enfermedades o accidentes. El espectro de lo que ofrece HLC, entre otras cosas, va desde acompañar, leer, traducir, ir de compras, llevar a citas médicas, el manejo de medicamentos e inyecciones. Home Life Care no es una residencia de ancianos, ya que sus servicios se prestan en la comodidad de la residencia del cliente. HLC está abierto 24 horas al día, 365 días al año.
Home Life Care es una empresa joven y enérgica, con mucho empuje, flexibilidad y capacidad de adaptación para atender las necesidades de las personas mayores y de cualquier persona que requiera cuidados especiales. Diana aclara: «Nuestro equipo profesional es bilingüe y de primera línea. El servicio que brindamos rompe con el paradigma piramidal que existe en otras agencias de cuidado en San Miguel, y en casi todo el mundo, donde el encargado ordena y los trabajadores ejecutan. En el modelo lineal que diseñé, todos contribuimos y nos complementamos».
El trabajo que realiza Home Life Care es cuidadoso y competente. La salud y la vida del cliente son lo más importante. Diana coordina los servicios que debe prestar el equipo en función de las necesidades del paciente y la familia. Todos los miembros del equipo tienen la misma cultura ética y profesional: Todos son humanitarios responsables que creen en los beneficios que aportan sus servicios.
Sin embargo, no basta con querer ayudar. Para dirigir esta empresa, Diana tuvo que re-entrenarse. Su formación tecnológica fue la base para crear una empresa multidisciplinar como esta, pero tuvo que prepararse para entender lo que hacen los miembros del equipo. «Ya estoy certificada por el Instituto Nacional de Geriatría (INGER) y por el Centro México de la Fundación Elisabeth Kübler-Ross (Centro EKR México), y actualmente estoy tomando un curso de auxiliar de enfermería en una escuela de San Miguel. Aliento a los miembros del equipo a actualizar su formación y, sobre todo, a aprender o mejorar el inglés, que es indispensable», relató Diana. La empresa y el equipo siguen evolucionando para adaptarse a los retos que se les presentan.
«Si uno mismo no está bien, no puede ayudar a nadie más. Para mí no hay jornada de nueve a cinco, ni semana de lunes a viernes; estoy disponible 24 /7 y lista para responder inmediatamente a las necesidades de los clientes. Cuando no hay emergencias, doy un paseo de cinco kilómetros con Simon, mi «cuidador personal», como llamo a mi precioso perro. Ambos vamos al Centro de Meditación del Callejón Blanco. Esto es esencial para mantener mi salud física y mental», dice Diana.
Enfatiza Diana, segura de sí misma y de su equipo: «Se necesita mucha disciplina para ser empresaria. Todos los días a las 9:30 de la mañana estoy en el trabajo lista para coordinar al equipo. Siempre estoy buscando personal calificado para que sigamos mejorando y creciendo. Para mantener la excelencia que exijo, debo atraer a profesionales con experiencia dispuestos a dar el cien por ciento.»
«Cuando la gente dice que montar una empresa es difícil, no exagero. Es como tener hijos. No sabes dónde te metes hasta que estás ahí, y ya no hay vuelta atrás», dice Diana con un brillo pícaro en los ojos.
«Estoy preparada. Mi equipo está preparado. Mi empresa está preparada. Todos estamos listos para servir cuando surge la necesidad», dice Diana con satisfacción.
Para ponerse en contacto con Diana Anaya y Home Life Care (HLC), visita www.homelifecare.mx, o llama al 442 331 4226.
Si conoces a alguien que te gustaría que entrevistáramos, envíanos su contacto a editorial@atencionsanmiguel.org
