Por Bernardo Moreno
En esta ocasión nos acercamos a platicar con uno de los artistas plásticos actuales con más años en la escena de arte de San Miguel de Allende. Empezó muy joven y ha hecho de todo. Aquí les dejamos la entrevista.
BM: Platícanos cómo empezaste en la pintura y cuánto tiempo llevas haciéndolo
JP: A los dieciocho años tuve un puesto en la Lagunilla, Ciudad de México, donde empecé a vender arte, y estudiaba diseño gráfico en la escuela de diseño de Coyoacán. Después, tomé clases de artes visuales en Philadelphia School of Art. Al regresar a México estudié en la Academia de San Carlos con el reconocido maestro Guetino. Mientras estudiaba vendía arte de Perú y hacía reproducciones. También hice murales en Tepoztlán, Cuernavaca y Ciudad de México.
A los treinta y un años tuve un lamentable accidente a caballo que me impidió continuar hasta los treinta y ocho años. Decidí reestructurarme en San Miguel de Allende y trabajar en una galería nueva especializada en arte mexicano, donde pude conocer y trabajar con mis mentores y maestros. He hecho varios intentos por representar artistas, pero desde hace doce años solo me dedico a vender mi propia obra.
BM: ¿Quiénes han influenciado tu trabajo como artista?
JP: Me gusta aprender de todos, profesores y compañeros. Pero leí, que el maestro no solo enseña, sino que acompaña y muestra el camino. Así que los artistas que más influyen en mi amor por el arte y mi obra son: Jordi Boldó y Esmeralda Torres. Son mis artistas preferidos y les tengo un aprecio especial.
BM: Tal vez es difícil, pero, ¿podrías definir tu obra?
JP: Precisamente como lo dijo Jordi Boldó «la obra es más fácil hacerla que hablar de ella» Si tuviera que describirla, yo creo que es similar a un abstracto expresionista, pero no quisiera encasillarme o poner mi obra en algo específico. Me gusta que no tenga una descripción precisa.
BM: Sabemos que usas la técnica de encáustica. ¿Nos puedes explicar qué es y por qué te gusta?
JP: La encáustica es de las técnicas más antiguas que existen, fue inventada por los egipcios. El nombre se lo dan los griegos y quiere decir grabar con fuego y se expande con el Imperio Romano. Los primeros escritos que hablan de la encáustica son de arquitectos de aquel gran imperio. Es una mezcla de cera de abeja con resina de árbol. Una técnica muy vieja, pero no muy popular, porque es un proceso de mucho cuidado y atención. Lo que más me gusta es que siempre hay sorpresas, porque es muy difícil de controlar.
BM: ¿Cuál es tu opinión del mercado de arte en San Miguel de Allende?
JP: El mercado de arte en San Miguel de Allende es una gran oportunidad para vender internacionalmente. La mayor parte de mi trabajo lo tienen clientes norteamericanos. Algunos coleccionistas importantes de mi obra están en Idaho, Arizona, Texas y Nueva York. Considero que San Miguel de Allende es una buena plataforma para apreciar una gran variedad de estilos que se sujetan a diferentes presupuestos. Me gustaría que los mexicanos conocieran más sobre la importancia y el efecto positivo que trae el arte a sus vidas. San Miguel de Allende es ideal para eso, por lo cual me gustaría que invirtieran en su cultura.
BM: Hoy en día, ¿dónde podemos ver tu obra?
JP: Pueden ver algunas de mis obras en instagram: @joaquin_pineiro. Y en “Joaquín Piñeiro & Beatríz Cota” en el centro de arte y diseño Fábrica La Aurora, local 1E y 10D